LOS AUTOINJERTOS CARTILAGINOSOS EN LA RINOPLASTIA

La rinoplastia abierta permite realizar múltiples procedimientos de refinamiento de la punta nasal.
Existen gran cantidad de alteraciones, tanto primarias (genéticas o constitucionales) como secundarias (tras rinoplastia previa) que producen puntas nasales poco armónicas, gruesas o bulbosas.

En los casos primarios encontramos cartílagos alares hipertrofiados con abundante tejido subcutáneo fibroadiposo.  En los casos secundarios existe tejido cicatricial (deformidad de supratip) y a menudo cartílagos asimétricos, semiamputados, ya que a menudo las rinoplastias cerradas no permiten realizar resecciones controladas.

Cuando la piel es muy gruesa (más frecuente en varones) y sebácea la punta carece de definición y aumenta la dificultad operatoria.

nariz-perfecta

 

La primera zona donante de los injertos cartilaginosos es el septum nasal. Las desviaciones  septales son frecuentes y en muchas rinoplastias realizamos septoplastias parciales.
El septum es una valiosa fuente de cartílago para tallar autoinjertos para soporte de la columela y para aportar proyección a la punta. Si ya se hubiera realizado una resección de septum en una cirugía primaria la zona donante para obtener cartílago es el pabellón auricular.

Para obtener una punta con la deseada proyección colocamos uno o dos injertos (superpuestos). Se trata de un procedimiento con efectos poderosos y casi milagrosos.

Es necesario fijarlos adecuadamente con suturas de 6/0 y tener cuidado de no proyectar excesivamente la nariz para evitar la sobrecorreción.

Pedro Cormenzana, especialista en Cirugía Plástica y Estética

Share This:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *